CENTRO INTEGRAL PARA ADOLESCENTES Y JÓVENES
POR UN VERANO SIN RIESGOS

El verano trae consigo más tiempo libre y, por lo tanto, más momentos que los adolescentes le pueden dedicar a la diversión, a los amigos y a internet. Por lo mismo, los especialistas aconsejan que antes que las conductas de estos jóvenes se tornen inaceptables y alteren la armonía familiar, conversar con ellos y establecer las necesarias “reglas del juego”. De esa forma se podrá compartir y lograr una experiencia positiva de esos meses de más relajo.

Los peligros del verano son muchos, como aquellos relacionados con la exposición al sol, accidentes y exceso en la ingesta de alcohol.

La pediatra y especialista en adolescencia y jefa del Centro de Adolescentes y Jóvenes de Clínica Las Condes, Verónica Gaete, señala que esa conversación al principio de las vacaciones será de mucha utilidad para consensuar límites, permisos y definir el tiempo que se dedicará a la familia y el que se les asignará a los amigos. “Debe ser un diálogo con altura de miras donde se consideren las necesidades y las características de cada uno de los jóvenes”, asegura la especialista, quien también explica que los límites y permisos no tienen que ser iguales para todos los hijos, sino que deben depender de la edad y las características personales. Eso, porque “mientras algunos adolescentes pueden prever riesgos, otros no son capaces aún de tomar medidas de autocuidado ni ser responsables de ellos mismos”. La idea es recurrir al llamado estilo autoritativo parental, que pone límites claros y que los supervisa con cercanía y cariño, señala.

Un buen consejo para que los padres puedan determinar el riesgo individual de sus hijos y reciban una asesoría que ayudará a evitar peligros en esta temporada en la cual suelen solicitar más libertades, es realizarles el Chequeo de Salud Integral del Adolescente que ofrece Clínica Las Condes. Esa es una instancia donde no sólo se darán medidas para evitar situaciones de salud como accidentes, sino también conductas de riesgo. “Se trata de un espacio de confianza donde los adolescentes pueden plantear inquietudes y en el cual los papás pueden ser orientados por profesionales”, manifiesta.