El riesgo de que los niños sufran alguna lesión andando en scooter, skate o bicicleta es relativamente alto, especialmente entre los varones. Las caídas más comunes son provocadas por irregularidades del pavimento, pérdida del equilibrio, mal uso de los frenos, andar de a dos o por ser golpeados por un auto.
“Una caída en bicicleta puede ser grave, en especial si no usa casco; por tanto, un golpe en la cabeza puede ser muy severo, y un golpe en un codo puede ser una fractura grave”, asegura el Dr Carlos Hinzpeter, pediatra de Clínica Las Condes.
El médico explica que desde los seis años los niños ya tienen la coordinación necesaria para andar con seguridad en bicicleta, y es cuando hay que tener más precaución. Por ello aconseja que un adulto debe enseñarle al niño a frenar, por dónde andar y los peligros de las calles.
El tipo de lesiones más frecuentes son las fracturas -incluidas piezas dentarias- y los esguinces. De éstos, el 70% ocurre en brazos o manos. Otras lesiones incluyen heridas, contusiones y desgarros: el 40% en brazos y manos; el 27% en cabeza y cara; y el 24% en piernas y pies.
Las lesiones son más frecuentes en los niños de menor edad, debido a que su centro de gravedad es más alto (tienen piernas más cortas), su sistema neuromuscular no está bien desarrollado, su poder de juicio en situaciones de riesgo es menor, y todavía no manejan bien los mecanismos de defensa.
Por ello y basándose en esta evidencia, el doctor Hinzpeter recomienda fomentar el uso obligatorio de cascos, rodilleras y coderas. Por ejemplo, dice, “el niño debe saber por dónde andar, no hacer maniobras que pueda perder control, como levantar la rueda delantera y conocer las ventajas y peligros del freno delantero y trasero”.
Además, recomienda practicar estos deportes en superficies lisas, ojalá pavimentadas y sin tráfico. No hacerlo de noche y, cuando se trata de niños pequeños, siempre deben estar bajo supervisión de un adulto.
La bicicleta debe ser siempre comprada de acuerdo al tamaño del niño.
El niño debe ser capaz de tocar el piso con sus dedos, cuando esté sentado en ella y debe haber 3 cm de espacio entre la barra y su entrepierna al estar de pie.
Practicar en lugares apropiados y alejados del tráfico.
Al caer, el menor lo primero que se golpea es la cabeza, por lo que es necesario fomentar desde pequeños el uso del casco.