Con los mismos estándares de calidad con los que cuenta Clínica Las Condes funciona el Centro Médico Integral de CLC en Chicureo. Es el primero en instalarse en este lugar y hoy, además de otorgar atención 24 horas adulto e infantil de primer nivel, abre sus puertas a las consultas médicas ambulatorias y a otros servicios que evitan que los chicureanos tengan que desplazarse a Santiago para recibir atención de salud. Vivir lejos de la ciudad y cerca de la naturaleza es un sueño para muchos. Sin embargo, hay quienes no se atreven a dar ese paso y prefieren quedarse en Santiago, cerca de los servicios básicos, de las clínicas y hospitales, que, en caso de una urgencia, les pueden salvar la vida.
Consciente de esa situación, Clínica Las Condes decidió instalar, hace tres años, un Centro Médico Integral en la localidad de Chicureo, para acercar la atención de salud a aquellos que deciden vivir en este lugar y las zonas cercanas a este punto.
La prioridad del centro es poder brindar una respuesta efectiva a los casos de mayor urgencia, para lo cual se cuenta con un equipo que traslada la tecnología más avanzada al lugar donde se produce la emergencia. Así lo explica la doctora Andrea Alba, coordinadora médica del Centro de Chicureo: “Contamos con un servicio de rescate las 24 horas del día, donde hay un equipo de médicos, enfermeros y técnicos que están habituados a trabajar con pacientes politraumatizados, accidentes graves, asfixia por inmersión o enfermos con patologías graves. Esta unidad está permanentemente en la base y puede salir inmediatamente a buscar a todos los pacientes que lo necesiten en Chicureo. Además, el servicio de urgencia cuenta con toda la implementación para la estabilización de una persona que llegue grave, todo el dispositivo de reanimación, monitores, medicamentos y lo que se requiere. Todos nuestros enfermeros y médicos tienen capacitación permanente y periódica en la atención de urgencia vital”.
Además, en caso de ser necesario, el Centro de Chicureo cuenta con un nuevo helipuerto que permite a los helicópteros de Clínica Las Condes trasladar a los pacientes más complejos hasta la clínica en un tiempo récord, como lo explica la doctora Alba: “La demora es de 10 a 15 minutos. Desde el momento en que llega el paciente en condiciones críticas, se avisa y demora lo que tarda el helicóptero en calentar los motores, en partir y bajar en Chicureo”.
El Centro Médico de Clínica Las Condes de Chicureo atiende entre dos mil y dos mil quinientos pacientes mensuales. Sin embargo, se espera que en los próximos siete años la población de esta localidad se duplique y llegue a los 100 mil habitantes.
Para hacer frente a este explosivo aumento de población, el centro médico creció y, a partir de este año, cuenta con nuevos servicios que incluyen más boxes de atención las 24 horas, los siete días de la semana, para niños y adultos. Además, consultas médicas diurnas con pediatras, ginecólogos, otorrinolaringólogos, cirugía de adulto y niño y, por último, traumatología adulto e infantil.
Por otra parte, como explica la doctora Andrea Alba, “hay mucha consulta que no es de urgencia vital, pero que requiere una resolución inmediata, por lo que hoy contamos con apoyo de radiografías y escáner las 24 horas. Además, tenemos un laboratorio que se está implementando, que hoy funciona con algunos exámenes básicos en horario diurno y el plan, en los próximo meses, es que sea cada vez más completo y con mayor horario”.
Rescate CLC es el único servicio en el país con avión medicalizado y diseñado como una verdadera clínica en el aire. Se trata de un helicóptero con servicio aeromédico de fábrica, que permite el traslado de pacientes graves con riesgo vital, ya sea en situaciones de emergencia (traslado primario) o traslados desde centros asistenciales (secundario), convirtiendo a este vehículo en una UTI en el aire.
Su espacio interior permite atender eficientemente todo tipo de pacientes críticos, al estar el 100% de su cuerpo accesible para ser tratado.
Helicóptero con alcance de 600 km, con un radio de autonomía hasta Copiapó por el norte y hasta Los Angeles por el sur. Permite llevar un familiar acompañando al paciente, además del médico, paramédico, enfermero y piloto.